EL VERNÁCULO TAILANDÉS
las tribus de las colinas y la arquitectura lanna
El Reino de Lanna, fundado por el rey Mangrai a finales del siglo XIII, se desarrolló en el norte de Tailandia hasta el siglo XVI y tuvo la ciudad de Chiang Mai como epicentro político y cultural. Antes de unirse a Siam, el antiguo nombre de Tailandia, fue colonia de Birmania (actual Myanmar), de manera intermitente, durante más de dos siglos.
La zona se caracteriza por sus cadenas montañosas, valles y abundantes bosques. Es el origen de cuatro grandes afluentes: los ríos Ping, Wang, Yom y Nan, cuya confluencia forma el río Chao Phraya, que fluye de norte a sur hasta desembocar en el Golfo de Tailandia.
La región norte de Tailandia, que constituía la mayor parte del antiguo reino de Lanna, abarca aproximadamente el 18% del país y alberga dos fascinantes tipologías arquitectónicas que reflejan la rica diversidad cultural de la zona: la arquitectura Lanna y la arquitectura de las tribus de las colinas.
Fuente: Sathāpitānon, N., Architecture of Lanna
Por un lado, la arquitectura Lanna, desarrollada durante el antiguo reino del mismo nombre, destaca por sus templos ornamentados, donde convergen influencias budistas y monárquicas tailandesas. Se caracteriza por sus templos con techos escalonados y una ornamentación intrincada, típica de las culturas tailandesa y birmana. El principal material empleado en su construcción es la madera, con un especial énfasis en la teca. Los diseños se caracterizan por su enfoque en la estética ceremonial y religiosa, resaltando elementos simbólicos y tradicionales.
Por otro lado, la arquitectura vernácula de las tribus de las colinas es propia de grupos étnicos como los karen, los hmong, los yuan y los akha, entre otros. Generalmente es más pragmática, ya que se adapta al entorno montañoso haciendo uso de materiales locales como el bambú y la madera que hay disponible. Las estructuras reflejan un estilo de vida autosuficiente, con viviendas simples y diseños funcionales donde se desarrollan actividades comunitarias.
Aunque son distintas en cuanto a función y estilo, estas dos tradiciones arquitectónicas comparten un profundo vínculo con el entorno natural y cultural del norte de Tailandia, reflejando las necesidades y valores de las comunidades que las originaron.
En este artículo, analizaremos las tipologías residenciales de ambas corrientes y su impacto en la configuración de la arquitectura tradicional de la región.
Arquitectura rural vernácula:
las tribus de las colinas
La arquitectura tradicional del norte de Tailandia es el resultado del cruce de influencias procedentes de los territorios que encintan la región: Burma (Myanmar) a oeste, el sur de China (Yunan) a norte, Laos a oeste y Siam al sur. Las diferentes etnias que se establecieron a lo largo de la región trajeron consigo las formas propias de su tradición, enriqueciendo así la arquitectura característica de la zona.
Influencia histórica y cultural en la arquitectura
Fuente: Wikipedia
Como sucedió también en otras partes del sudeste asiático, la indianización de la región comenzó muy pronto con la influencia del imperio Khmer y dio lugar al nacimiento de los reinos Mon. En la región del norte, el más destacado de estos reinos fue Hariphunchai, fundado alrededor del siglo VIII con capital en la ciudad de Lamphun, un importante centro cultural y religioso del Budismo Theravada. Este proceso continuó hasta el siglo XIII, cuando se integraron elementos culturales, religiosos y arquitectónicos procedentes de la India.
A finales del siglo X, los tailandeses originarios del sur de China y Burma (los Thai, ver mapa) se extendieron por la península y crearon sus propios principados, desplazando a las etnias locales hacia las montañas.
A estas comunidades se sumaron, a finales del siglo XIX, los Yao y los Hmong procedentes de China. De este modo, las distintas poblaciones convivieron en la misma zona, organizándose por franjas a lo largo de las laderas de las montañas. Actualmente se las conoce, en inglés, como Hill Tribes.
La mayor parte de la población, no obstante, formaba parte de la etnia Thai y se establecía en el valle, a lo largo de ríos, canales o carreteras. Estos se dedicaban al cultivo de arroz, una actividad muy rentable gracias a la abundancia de tierras fértiles. La religión predominante era el Budismo Theravada.
Adaptación arquitectónica al entorno y el clima local
La geografía y el clima de la región definieron el tipo de construcciones tradicionales que se desarrollaron. El clima cálido y húmedo, con temperaturas medias de 25 °C y largos periodos de lluvias entre mayo y octubre, junto con una topografía irregular repleta de bosques y colinas, proporcionaban una gran diversidad de recursos naturales. Materiales de fácil acceso, como el bambú y las hojas secas, se convirtieron en elementos esenciales para la arquitectura tradicional de la zona.
De un modo muy parecido a lo que ocurría en otros lugares del Sudeste Asiático, como Laos, Malasia, Camboya, Indonesia y Filipinas, la tipología de vivienda dominante era la de una construcción de madera elevada sobre postes, una estrategia que les permitía adaptarse a las pronunciadas pendientes de los bosques y, al mismo tiempo, protegerse del agua y los animales a nivel del suelo.
La casa tradicional de las tribus de las colinas guardaba significativas similitudes con las de las tierras bajas: eran casas unifamiliares elevadas del suelo mediante postes, con techos a dos aguas, pocas aberturas y abundantes rendijas por las que entraba el aire y la luz, una veranda y una terraza de gran tamaño en la parte frontal y otra más reducida en la parte trasera. El interior se organizaba según las creencias sobre los espíritus sagrados, la jerarquía y el género de sus habitantes.
La riqueza de la arquitectura del norte es el resultado de la confluencia de las tipologías propias de cada una de las distintas etnias. Repasamos aquí algunas de las etnias que ocuparon un papel más relevante:
los hmong
La comunidad Hmong tiene sus orígenes en el sur de China, en las zonas montañosas de Hunan, Guizhou y Yunnan, desde donde se desplazaron hacia el sur en dirección al norte de Vietnam, Laos, Tailandia y Burma.
Su distinguían por el dominio de la agricultura rotativa, que les permitía cultivar especialmente arroz y opio en los bosques tropicales de las colinas.
Fuente: Her Works
Características principales
Se agrupaban en caseríos pequeños de no más de diez casas (lub) en las que vivía el grupo entero de la familia nuclear: los padres, los hijos solteros y los hijos casados junto a sus esposas.
El aspecto más destacado de los asentamientos Hmong era el énfasis que ponían en la elección de un emplazamiento auspicioso, para lo que se apoyaban en técnicas de adivinación tradicionales. El lugar estaba vinculado a la felicidad y la prosperidad del hogar y no dudaban en desmontar y trasladar las viviendas a una nueva ubicación cuando se producía una enfermedad, una muerte o había malas cosechas, lo que explica la itinerancia de su tipo de agricultura. La casa representaba para ellos el centro espiritual de la actividad del hombre en el mundo.
Construcción
Por lo general, las casas Hmong se apoyaban directamente en el suelo. En caso de terrenos inclinados, construían antes una plataforma encajada parcialmente en la ladera y la reforzaban con una empalizada.
Fuente: Hmong Hill Tribe Lodge. Enlace.
La estructura seguía el esquema de una sencilla cabaña con techo a dos aguas: tres hileras de postes de madera sostenían el armazón de bambú de la cubierta. El tejado se cubría con hierba y sobresalía en todo el perímetro, dejando un espacio inferior en el que, tanto humanos como animales, se resguardaban del sol y la lluvia. Puesto que no había ventanas ni aberturas en la cubierta, el interior del techo solía estar negro por el hollín del fuego.
La piel exterior de la casa solía consistir en paneles de madera, colocados verticalmente encima de una pieza de zócalo y un tablón superior. De este modo, cuando tenían lugar celebraciones especiales y necesitaban que entrase más luz en la vivienda, podían retirar fácilmente algunos tablones y volverlos a colocar al terminar.
Los Karen
Fuente: kk_wpg Flickr
La etnia Karen es originaria de las montañas de Burma, cerca de la frontera con Tailandia, y su lengua pertenece a la familia sino-tibetana.
Practican la agricultura sedentaria y, siguiendo un modelo parecido al de los núcleos urbanos, se establecen en pequeñas aldeas agrupadas alrededor de una aldea original. Estas aldeas secundarias están formadas por entre 5 y 50 hogares nucleares que reciben el nombre de Hinton. Este sistema, con un grupo limitado de hogares nucleares, ayuda a preservar la identidad comunitaria y mantener un equilibrio entre independencia y apoyo colectivo.
Cada casa aloja la familia nuclear formada por los padres y los hijos solteros. Cuando estos contraen matrimonio, se construyen su propia casa, aunque siguen perteneciendo a la unidad familiar. Por ello, las casas suelen ser pequeñas y sencillas, con una única habitación para toda la familia.
La falta de altares en las viviendas y un centro religioso en la aldea podría sugerir una espiritualidad más ligada a prácticas y rituales al aire libre o individuales. Esto contrasta con otros grupos étnicos en la región, que suelen integrar espacios religiosos en sus diseños arquitectónicos.
Fuente: Thomas Stankiewicz
Construcción
De un modo similar a lo que ocurre en los demás casos, las construcciones de los Karen se elevan entre 1,2 y 1,5 metros del suelo mediante postes de madera. Esta estrategia cumple varias funciones importantes. Protege contra inundaciones durante la temporada de monzones y permite la circulación del aire debajo de la vivienda, ayudando a mantenerla fresca en climas cálidos. La parte inferior de la vivienda, en contacto con el suelo, se utiliza para almacenar el ganado (cerdos, gallinas, ovejas) durante la noche, así como la leña durante la temporada de monzones. Esta separación del ganado de la zona habitable refuerza la higiene y mejora la funcionalidad del espacio.
No muy lejos de la casa suele haber un granero, algo más bajo que la propia casa.
El volumen cerrado, en el piso superior, consta de una terraza y una veranda de entre 1,5 y 2 metros de ancho, dos espacios centrales en la vida diaria de los Karen. No solo sirven como lugares para descansar o realizar actividades como el tejido, sino que también fomentan la interacción social dentro de las aldeas. Estos espacios abiertos reflejan la importancia de la comunidad en la cultura Karen, donde la vida cotidiana está entretejida con las relaciones familiares y vecinales.
El suelo de ambas se construye con postes de bambú partidos por la mitad y es donde los habitantes pasan una buena parte del día, tejiendo o descansando. El interior de la vivienda consta de dos piezas, una habitación exterior (thau kho) y una interior (deu). En estas, el suelo sigue el mismo sistema, mientras que las paredes se hacen con láminas de bambú trenzadas. No hay ventanas.
Los Akha
Los Akha son originarios de las montañas que se extienden desde la provincia de Yunnan en China hasta el norte de Tailandia. Pertenecen a la familia de lenguas tibetano-burmesas. Actualmente se pueden encontrar en las provincias de Chiang Mai y Chiang Rai.
Fuente: All Points East
Se agrupan en aldeas que pueden variar drásticamente de tamaño y capacidad. Sus casas se pueden clasificar en dos tipos: las que están elevadas del suelo con postes y las que apoyan directamente sobre el suelo. La organización interior es parecida a la de los otros grupos: en la planta inferior , bajo la casa, se almacena el ganado y en la parte superior las pertenencias familiares.
Construcción
Las construcciones tienen techos inclinados hechos con paja y hastiales ornamentados con piezas de bambú o madera. En la parte inferior, se mantiene la existencia de una terraza y una veranda, así como un granero elevado y decorado, que puede estar unido a la vivienda principal o algo separado.
En este caso, sí que hay un pequeño altar elevado sobre pequeños postes donde se encuentra el espíritu protector del arroz.
Los Shan
Fuente: OLIVER, P. Encyclopedia of vernacular architecture of the world
Los Shan proceden de Birmania y se establecieron en las regiones de Fang (al norte) y Mae Hong Son (al oeste). Los segundos llevan algo más de tiempo en la zona y su arquitectura tiene influencias propias de la etnia Yuan: casas dobles con una terraza y una veranda. A diferencia de la tipología de los Yuan, donde la cocina se encuentra en la parte trasera y tiene un acceso independiente, la vivienda propia de los Shan suele estar cerrada en este flanco, donde se sitúa una pieza que sirve o bien de dormitorio o bien de almacenaje para el arroz.
El esquema de la casa es muy parecido a los anteriores: elevada sobre postes, con almacenaje para herramientas, leña y granado en la parte inferior y los espacios habitables en el primer piso.
Construcción
También en este caso, se trata de construcciones de madera elevadas mediante postes clavados en el suelo, con un tejado a dos aguas hecho con paja u hojas de palma.
arquitectura lanna en zonas urbanas
Mientras que las tribus de las colinas se asentaron en las laderas de las montañas y en los bosques, el grueso de la población lo hizo en los valles, donde la inclinación era menor y podían dedicarse a la agricultura más cómodamente.
De un modo parecido a las anteriores, la madera autóctona era el material predominante, utilizado tanto en la estructura como en las intrincadas ornamentaciones con diseños religiosos. La variedad más utilizada era la de teca, seguida del palo de rosa, la madera de hierro y la de shorea o balau (similar a la de teca en cuanto a resistencia y durabilidad)l.
Los Thai Yuan
En la cuenca de Lanna (Chiang Mai, Chiang Rai, Muang Nan, Lampang y Phrae), en Laos y en Vietnam, los tai eran el grupo étnico predominante. La región albergaba también diversas tribus locales, entre ellas los Lua (o Lao), quienes compartieron una relación cercana con los primeros. Gracias a su habilidad técnica y gestión de recursos, los tai y los lua se fusionaron y gobernaron conjuntamente el reino de Yonok, precursor del reino de Lanna. Juntos promovieron proyectos como la construcción de presas públicas, esenciales para llevar agua a los arrozales.
Más adelante, el reino de Yonok se fusionó con el de Hariphunchai, dando lugar al Reino de Lanna. Hariphunchai, que floreció entre los siglos VII y XIII, dejó una fuerte huella en Lanna, especialmente en el ámbito religioso.
Entre los siglos XVI y XVII, Lanna vivió su época dorada, destacando por su elaborada arquitectura, que refleja la herencia de las creencias budistas, los espíritus ancestrales y la naturaleza, recogiendo así el legado de todos aquellos pueblos que habían ido contribuyendo a lo largo de su historia.
Puesto que la zona era fértil y estaba bien irrigada, el cultivo de arroz era muy rentable. Gracias a ello, los campesinos podían permitirse construir grandes casas de madera, con cubiertas de tejas de arcilla y graneros ornamentados. Era habitual tener casas dobles, colocadas una junto a la otra. Mientras que en la primera vivían los padres, la segunda se utilizaba como vivienda temporal de los hijos durante los primeros años tras contraer matrimonio. Cuando el siguiente hijo se casaba, construían una nueva casa para los primeros, cerca de la vivienda principal.
Frente a las dos casas había una terraza y una veranda (toen), una especie de porche donde la familia se reunía, comía y recibía a los visitantes. Detrás del toen se encontraban las habitaciones. En la parte trasera, en una habitación más pequeña, se ubicaba la cocina, que solía tener una terraza secundaria con acceso independiente donde se almacenaban los utensilios de cocina.
Construcción
Fuente: OLIVER, P. Encyclopedia of vernacular architecture of the world
Las casas se elevan sobre unos pilotes de entre 1,5 y 2,2 metros y siguen una orientación norte-sur. El armazón, la estructura, está compuesto por dos pórticos que sostienen el techo y cuyos postes están enterrados en el terreno. El suelo, de teca en las casas más acomodadas, se apoya sobre vigas encajadas en los postes de la planta baja. Por otro lado, la cubierta cuenta con grandes aleros que protegen el interior de la vivienda del sol y de la lluvia. Debido a la inclinación pronunciada del tejado, necesaria para evacuar rápidamente el agua de lluvia y evitar las filtraciones, se recurría al uso de ménsulas para apoyar mejor los aleros.
El otro elemento constructivo destacado son los muros. En las casas antiguas, las paredes se construían con tablones verticales y, en algunos casos, se inclinaban y ensanchaban en la parte superior. Los hastiales (el triangulito de pared superior que queda entre las dos cubiertas) se cerraba con paneles de madera y, en algunas casas antiguas, los bordes solían tener remates tallados (kalae), muy característicos de la arquitectura Lanna Thai de esta región.
Características principales
Tipologías residenciales
Las ruen o huen eran las viviendas tradicionales de las tierras bajas. Similar a la tipología vernácula de las montañas, se trataba de casas elevadas sobre postes, con una estructura de madera o bambú y techos a dos aguas con grandes aleros que protegían las paredes laterales. Seguían un diseño tradicional cuidadosamente elaborado, cuyas piezas se ajustaban a medidas precisas y se ensamblaban utilizando cuñas y tornillos de madera.
En este caso, no obstante, constaban de pequeñas ventanas para facilitar la entrada de luz natural, así como rendijas entre los paneles de las paredes y el techo para facilitar la ventilación cruzada.
Las casas más humildes, de menor tamaño, utilizaban el bambú como material principal, trenzado en el caso de los paneles de las paredes y cortado por la mitad en la estructura del suelo. Para el ensamblado de las diferentes partes se utilizaba el ratán.
En el caso de viviendas de mayor tamaño, se utilizaba la madera para la estructura de pilares y vigas, así como para los tablones con los que se cubrían las paredes y el suelo.
La organización de cada una de ellas, generalmente, seguía el mismo esquema que las anteriores.
Identificamos dos estilos predominantes:
Huen Mai Jing
Es la tipología destinada a la realeza y a los altos cargos. Se trata de casas elegantes hechas de madera y bastante elevadas del suelo para garantizara una buena higiene y protegerse de animales y enemigos. Ejemplo: Hor Kham y Wiang Kaew Royal.
Huen Kalae
Originaria de Chiang Mai, aunque se extendió hasta Lamphun. Las Kalae son las casas de las clases acomodadas - entre ellos, los gobernadores - y su formalización es un reflejo del estatus social de sus propietarios. Están hechas de madera noble, algo que antiguamente estaba restringido exclusivamente a los grupos sociales más aventajados.
Ambos casos, generalmente, siguen el esquema de una casa doble (o gemela) con una terraza compartida y tejados independientes orientados de norte a sur y cubiertos con tejas de madera o arcilla. Las casas se usaban principalmente como dormitorios, mientras que la cocina se ubicaba en la parte trasera o bien separada en otra pieza menor. El baño solía estar separado de la vivienda.
La terraza exterior y la veranda frente a ambas casas se utilizaba como una gran zona de trabajo y descanso, algo así como un salón al aire libre. En estos casos, es habitual encontrar una escalera en el lado exterior de la terraza y otra junto a la fachada, protegida por el alero de la cubierta.
Los suelos y las paredes estaban hechos de tablones de madera, un material abundante en la región. Las pocas ventanas que había eran pequeñas y, en algunos casos, tenían paneles deslizantes para regular la entrada de luz natural y aire (Fa Lai).
El nombre de Kalae hace referencia a las piezas en forma de "V" que se colocan en los extremos de los techos, un rasgo característico tanto de las casas Lanna como de las de algunas tribus de las colinas, como los Karen o Hmong. Representan más que un adorno: tienen profundos significados culturales y espirituales. En la arquitectura Lanna, el Kalae a menudo está asociado con la protección espiritual, con raíces en creencias animistas y budistas. Similarmente, entre las tribus de las colinas, puede tener connotaciones de buena fortuna.
En el exterior, además, se erigían dos pequeñas construcciones: el Ho Chaotee tenía la forma de un pequeño templo y estaba destinado a rendir homenaje a los espíritus sagrados, y el Ho Phee Pu Ya, similar a la casa tradicional Lanna, para honrar a los ancestros.
La diferencia entre ambas tipologías es que las segundas cuentan con un elemento decorativo llamado Kalae en el extremo del faldón.
PERVIVENCIA DE LAS FORMAS TRADICIONALES
Las formas propias del vernáculo tailandés siguen presentes en la arquitectura moderna, donde aparecen constantemente reinterpretadas y adaptadas a las necesidades actuales.
Entre los elementos heredados más destacados se encuentran:
Edificios elevados sobre el nivel del suelo, una solución que no solo protege contra inundaciones, sino que también mejora la ventilación interior y optimiza el uso del espacio inferior.
Plantas bajas sombreadas, diseñadas como áreas sociales bien ventiladas, que ofrecen refugio del calor y la radiación solar.
Sistemas de control climático, como muros porosos, celosías y brise-soleil, que favorecen la ventilación cruzada y la protección frente al sol.
Aleros pronunciados, que actúan como barreras frente a la lluvia y la luz solar intensa.
Distribución en pabellones, con piezas organizadas en torno a pasajes cubiertos, lo que refuerza la conexión entre los distintos espacios.
Conocer y entender los principios de la arquitectura tradicional tailandesa es fundamental para poder interpretar correctamente y apreciar el valor de los proyectos contemporáneos.
bibliografía
*La redacción de este artículo se ha hecho, en gran medida, gracias a la información extraída de los siguientes libros:
Architecture of Lanna Sathapitanon, Nithi. Architecture of Lanna: To Commemorate the 720th Anniversary of Chiang Mai City. Bangkok: Li-Zenn Publishing, 2016. ISBN: 9786167800189.
Encyclopedia of Vernacular Architecture of the World Oliver, Paul (Ed.). Encyclopedia of Vernacular Architecture of the World. Cambridge: Cambridge University Press, 1997. ISBN: 9780521564229.
Piesik, Sandra (Ed.). Habitat: Vernacular Architecture for a Changing Planet. Londres: Thames & Hudson, 2017. ISBN: 9780500343241.
Asimismo, ha sido de gran ayuda la información recogida gracias a las siguientes instituciones:
The Center for the Promotion of Arts and Culture at Chiang Mai University
The Lanna Traditional House Museum
Lanna Architecture Center
Tanto los dibujos(planta y alzado) como la maqueta de la tipología Kalae pertenecen al Vernadoc del Lanna Architecture Center de Chiang Mai.
Los croquis de las casas de las tribus de las colinas se han extraído de la Encyclopedia of vernacular architecture of the world.
BIBLIOGRAFÍA DE INTERÉS
ARTÍCULOS RELACIONADOS